LaSociedad Francesa de Cirugía Plástica (SoFCPRE), a la que pertenecemos, ha publicado nuevas recomendaciones relativas al aumento mamario mediante inyección de grasa en las mamas con fines estéticos o de reconstrucción mamaria.

Una de las principales limitaciones de este tipo de aumento mamario mediante inyección de grasa es que las cicatrices provocadas por la grasa inyectada pueden dar lugar a imágenes radiológicas que interferirían en el seguimiento del cáncer de mama. La otra incertidumbre es el posible riesgo de aumento del cáncer de mama. Hasta la fecha, no existe ningún estudio científico que sugiera un aumento significativo del riesgo de cáncer de mama en mujeres sin antecedentes de inyecciones de grasa mamaria. Por otra parte, es cierto que no disponemos de estudios a largo plazo que demuestren que no existe un aumento de este riesgo, sobre todo teniendo en cuenta que el cáncer de mama afecta a una de cada 10 mujeres de la población general.

Con fines estéticos

Por ello, la Sociedad Francesa de Cirugía Plástica recomienda esta técnica a las mujeres sin riesgo de cáncer de mama: menores de 35 años, sin antecedentes personales ni familiares de cáncer de mama y tras una radiografía de mama negativa (mamografía y ecografía).

Personalmente, creemos que el límite de 35 años es un poco arbitrario, dado que el riesgo máximo de cáncer de mama se da entre los 50 y los 65 años. Por otra parte, me parece evidente que deben excluirse las mujeres con antecedentes familiares de cáncer de mama en primer grado. Lo esencial es la calidad de la evaluación radiológica y la necesidad de un seguimiento a largo plazo en un centro especializado. Por nuestra parte, antes de una operación de este tipo, pedimos a un radiólogo especialista que realice una mamografía, una ecografía y una resonancia magnética. La misma evaluación se repite 3 meses después de la operación por el mismo radiólogo. A partir de entonces, no recomendamos repetir estas pruebas antes del cribado del cáncer de mama a los 50 años.

Reconstrucción mamaria

La empresa valida esta técnica tras la extirpación total de la mama. El riesgo de recidiva local se considera extremadamente bajo.

La situación es mucho más compleja cuando se trata de tratar las secuelas estéticas de los tratamientos conservadores. Se trata de mujeres cuyo cáncer de mama ha sido tratado mediante tumorectomía (extirpación parcial de la mama alrededor del tumor) seguida de radioterapia, y que presentan secuelas estéticas como muescas. En estos casos, el riesgo de recidiva local (reaparición del cáncer en la mama) es elevado (en torno al 5% de probabilidades de recidiva a los 5 años en mujeres mayores de 50 años). La inyección de grasa puede tratar este problema, pero va directamente en contra del efecto deseado de la radiación, cuyo objetivo es "atrofiar" el tejido para que el cáncer no pueda reaparecer. Además, algunos estudios han detectado una mayor tasa de recidiva local en las mujeres inyectadas. En estos casos, la SoFCPRE recomienda un retraso mínimo de 3 años entre el cáncer y la inyección de grasa. Una vez más, tenemos algunas reservas y adaptaremos esta recomendación a la edad de la paciente en el momento de su cáncer de mama. Las mujeres menores de 40 años tienen una tasa de recidiva local mucho más elevada. Mantendremos un retraso mínimo de 5 años entre los 40 y los 50 años, y de 10 años antes de los 40.

Además, los miembros de la SoFCPRE se comprometen a notificar todos los casos de inyección de grasa en las mamas de forma anónima a través de Internet, con el fin de establecer una base de datos nacional y poder publicar los resultados a largo plazo de esta técnica.

Creemos que estas recomendaciones, aunque sean criticables, tienen el mérito de poner de relieve el hecho de que los cirujanos plásticos evalúan sus prácticas y dan prioridad a la seguridad de sus pacientes.

Hemos optado por realizar inyecciones de grasa con fines estéticos, porque creemos que es una técnica fiable que ofrece un resultado natural sin los inconvenientes de un implante de silicona. No obstante, informamos a los pacientes de las limitaciones e incertidumbres asociadas a este procedimiento. Además, hemos establecido redes asistenciales con radiólogos expertos para poder hacer un seguimiento a largo plazo de nuestros pacientes.

Para más información: