Los peligros del lipofilling de glúteos

La reciente publicación de un artículo de un grupo de trabajo de cirujanos plásticos estadounidenses hace saltar las alarmas sobre los riesgos del lipofilling de glúteos o Brazilian Butt Lift (BBL).

El lipofilling de glúteos se ha desarrollado recientemente en Estados Unidos y Sudamérica como técnica de aumento de glúteos. Esta cirugía consiste en la liposucción de diversas zonas del cuerpo ricas en grasa, seguida de un filtrado de la grasa aspirada para eliminar restos y purificarla. Esta purificación puede realizarse mediante una centrifugadora o diversos sistemas (PureGraft®, Revolve®...). A continuación, la grasa pura se inyecta en los glúteos mediante finas cánulas, depositando pequeñas cantidades de grasa en diferentes planos anatómicos. Se trata de un injerto, es decir, una técnica destinada a colocar un tejido autólogo (procedente de su propio cuerpo) sin vascularización (es decir, sin riego sanguíneo propio), en una estructura anatómica que aceptará este tejido integrándolo. Como ocurre con cualquier injerto, la absorción no es completa y, por lo general, la mitad de la grasa inyectada no se absorbe.

El principal peligro de esta técnica procede del hecho de que, como el cirujano prevé esta reducción de volumen del 50% en el postoperatorio, tiene tendencia a sobrellenar los glúteos durante la intervención. Esto crea una sobrepresión que tiende a conducir la grasa inyectada hacia las pequeñas venas situadas en el músculo glúteo mayor. Se dice que la grasa emboliza la vena. A continuación, la grasa pasa a la vena cava antes de bloquear los vasos pulmonares. Esto se conoce comoembolia grasa pulmonar, que, si es grave, suele ser mortal.

En los últimos 15 años se han descrito algunas muertes esporádicas en Sudamérica. El aumento del número de BBL en EE. UU. (se calcula que en 2016 se realizaron 25 000 procedimientos de este tipo en este país) ha provocado un número significativo de muertes (más de 25 muertes documentadas).

El artículo de la ASJ analiza los resultados de un cuestionario en línea enviado a 1963 cirujanos plásticos estadounidenses y 2880 cirujanos internacionales. Nosotros respondimos a este cuestionario (afortunadamente sin notificar ninguna complicación mortal de los 38 casos que hemos realizado hasta la fecha). De los 610 cirujanos que respondieron a la encuesta, se notificaron 32 casos de complicaciones mortales y 103 no mortales de un total aproximado de 200.000 intervenciones notificadas. Por lo tanto, la encuesta estima que la tasa de mortalidad de este procedimiento se sitúa en torno a 1 de cada 6.000 casos. Al cotejar los datos con los médicos forenses estadounidenses, parece que esta tasa se aproxima más a 1 de cada 3.000 en la realidad.

Esta tasa de mortalidad es casi veinte veces superior a la de la cirugía plástica estándar (aproximadamente 1 de cada 55.000 casos) y cuatro veces superior a la de la cirugía plástica considerada hasta ahora la más peligrosa, la abdominoplastia (1 de cada 13.000 casos, principalmente por embolia pulmonar no grasa).

El análisis del cuestionario muestra que la inyección en los planos musculares profundos de la nalga multiplica por cuatro este índice de complicaciones.

Este estudio alerta de que el lipofilling de glúteos es el procedimiento de cirugía plástica más peligroso en términos de mortalidad.

Los implantes de glúteos, que es una técnica que dista mucho de ser perfecta, con una tasa de complicaciones postoperatorias de alrededor del 10% (principalmente disrupción cicatricial e infección), no parecen tener la misma tasa de complicaciones mortales, aunque no se ha realizado ningún estudio multicéntrico.

Creemos que el lipofilling de glúteos o BBL no es una opción razonable cuando se considera un gran aumento de glúteos. De hecho, debido a la tasa de reabsorción del 50%, a menudo se necesitan de 2 a 3 cirugías para conseguir un aumento de 500 cc. La tasa de complicaciones mortales durante estas cirugías repetidas no es aceptable para nosotros.

Para el aumento de glúteos de pequeño volumen, puede considerarse el lipofilling de glúteos, pero debe informarse al paciente por escrito de la tasa de mortalidad extremadamente alta de este procedimiento. El procedimiento debe realizarse en una clínica acreditada con un escáner CT para detectar la aparición de embolia grasa pulmonar, y es aconsejable monitorizar al paciente durante al menos 24 horas para detectar y tratar cualquier complicación. En caso de duda, el paciente debe ser trasladado inmediatamente a una unidad de cuidados intensivos.

En cuanto al turismo quirúrgico para una operación tan arriesgada, lo desaconsejamos totalmente.... recomendamos la técnica del implante glúteo que da muy buenos resultados.